Los escasos resultados de la emergencia hídrica en Tenerife, cuya declaración está a punto de cumplir un año (se produjo en mayo de 2024), hacen temer al Grupo Socialista en el Cabildo de Tenerife que la situación crítica del campo tinerfeño se mantenga también el próximo verano. “Votamos a favor de la propuesta de emergencia hídrica de la presidenta, pero su ineficaz gestión puede hacer perder al campo tinerfeño el verano de 2024 y el próximo”, según ha advertido el consejero socialista Javier Rodríguez Medina.
El Cabildo de Tenerife ha prorrogado este jueves (27 de febrero) ocho meses más la emergencia hídrica en la Isla, que ya fue prorrogada en noviembre de 2024, ante los escasos resultados de las medidas impulsadas por el grupo de gobierno, que apenas ha logrado añadir hasta febrero de 2025 al sistema hídrico 19.707 metros cúbicos de agua, de un total previsto de 37.152 (el 53%) que se anunciaron en junio de 2024, por lo que “la emergencia hídrica solo ha tenido de emergencia la denominación”, ha asegurado el consejero.
No solo las cifras generan desconfianza, sino el hecho de que el Cabildo afronte una nueva prórroga sin un gerente en la entidad pública empresarial Balsas de Tenerife (Balten), uno de los principales instrumentos con los que cuenta la corporación para hacer frente a la emergencia hídrica. “Ni siquiera ha convocado un concurso para cubrir esa plaza, por lo que nos tememos lo peor”, ha agregado el consejero.
Javier Rodríguez Medina ha agregado “el magnífico trabajo que realiza el personal del Consejo Insular de Aguas de Tenerife que, desgraciadamente, sin embargo, no cuenta con los medios suficientes”. “No se puede pretender que el mismo personal ejecute un presupuesto muy superior porque eso no va a funcionar”, ha advertido.
En febrero de 2024, la presidenta del Cabildo anunció su intención de declarar la emergencia hídrica, ante lo cual el presidente del Grupo Socialista, Pedro Martín, advirtió a Rosa Dávila que, aunque más efectista, sería más eficaz un plan de choque con obras e inversiones concretas, que Martín presentó en rueda de prensa ese mismo mes.
No obstante, el Partido Socialista apoyó al grupo de gobierno en su declaración de emergencia hídrica, declarada el 1 de marzo y de la que se va a cumplir ahora un año. “A pesar de todo y que no apoyen nuestras iniciativas, seguiremos apoyando todas las propuestas del gobierno insular que puedan ir en beneficio de la agricultura de Tenerife”, ha subrayado Martín.
La propuesta del Grupo Socialista preveía una inversión de 65 millones de euros con el objetivo de poner a disposición del sector agrícola más de 40.000 metros cúbicos de agua en un breve periodo de tiempo, apoyándose en el uso de desaladoras portátiles que habían sido utilizadas ya en el mandato anterior, con el propio Pedro Martín como presidente.
Sin embargo, Dávila insistió en la declaración de emergencia hídrica, cuyos resultados, a día de hoy, han constituido un evidente fracaso.