La Feria Tricontinental de Artesanía cerró ayer domingo (3 de noviembre)), sus puertas tras nueve intensos días con un record de asistentes. Alrededor de 40.000 personas acudieron a disfrutar del mayor evento artesano de Europa que se desarrolló desde el pasado 26 de octubre.
En total se contó con la participación de 250 expositores, 72 de ellos artesanos de Canarias, 150 que viajaron a Tenerife, de los cuales 40 fueron artesanos portugueses. La fantástica decoración del diseñador Santi Castro recreó estampas de mosaicos portugueses con técnicas de trabajos artesanales de telas sobre metacrilato que adornan todo el recinto. La magia de Daniel Pages recreó las impresiones de los Stands invitados. Además, el evento contó con una amplia oferta formativa mediante más de 30 talleres y ocho masterclass.
El consejero de Empleo y Educación, Efraín Medina, mostró su satisfacción por la gran acogida que ha tenido la feria y agradeció el trabajo de todo el equipo que la ha hecho posible. “Ha sido una feria sin precedentes, resultado del trabajo en común de muchas personas que han hecho posible que la Isla se haya convertido durante nueve días en el centro de artesanía del mundo”. En este sentido, hizo hincapié en que Tenerife ha disfrutado no solo de una feria de calidad, de felicidad y de los sentidos, sino que se ha cumplido el objetivo principal que es el de impulsar sinergias entre artesanos de diferentes partes del mundo para que repercutan en desarrollo económico y en pervivencia de las tradiciones artesanas. “Nos sentimos muy satisfechos no solo por la elevada afluencia del público, sino porque también los artesanos que han participado han registrado buenos resultados en sus ventas”, aseveró.
La Feria
A lo largo de los años, la Feria Tricontinental de Artesanía se ha consolidado como puente intercultural entre los pueblos de Iberoamérica, de África y la Europa meridional y como vehículo para la promoción y difusión de las manifestaciones artesanales que se dan a un lado y otro del Atlántico. La importante asistencia de artesanos de diversas procedencias, la gran variedad de productos y técnicas expuestas y la buena aceptación del público la han colocado como uno de los eventos más importantes y populares en el calendario de ferias que se realizan en el ámbito regional y significa la mayor concentración para la comercialización de artesanías foráneas de cuantas se celebran en España.
Los expositores en la Feria fueron ocupados por destacados profesionales y artistas tanto de ámbito regional, nacional como internacional. Estos últimos se dedican al diseño textil originario de la comunidad tzotzil en Magdalena Aldama, Chiapas (México); a la artesanía de madera de Copal tallada; la creación de retablos; la joyería artesanal; al calado entre muchos otros oficios.
Por su parte el país protagonista, Portugal, contó con una amplia producción artesanal que podremos ver en persona en la Feria, entre las que destacan las cerámicas y azulejo, que decoran las principales fachadas, alfombras y tapices, marroquinería, bordados, talla de madera, joyería, trabajos con escamas y alfarería. La artesanía canaria estuvo ampliamente representada con artesanos de todas las islas y especialmente de Tenerife, al ser anfitriona de este evento. Algunos oficios que se presentaron son: Cerámica, Jabonería, Calado, Alfarería, Roseta, Cerería, Muñequería, Joyería, Cestería, Cuchillería, Esmalte, Lutier, Torneado de Madera, Reciclado de Materiales, Tejeduría, Papel y Cartón, entre otras. Asimismo, la feria contó también con la participación institucional de los Cabildos Insulares, que presentan en sus stands artesanías tradicionales en peligro de extinción, como la cestería en sus múltiples variantes, el hilado de la lana,etc.
Premios
El artesano ecuatoriano Ricardo Villaba resultó galardonado con el Premio del Museo de Artesanía Iberoamericana. En este sentido, los artesanos Rodrigo Lizama, de Chile y Jesús Hernández Torres, de México recibieron el segundo y tercer premio mientras que la mejor decoración de la Feria Tricontinental recayó en el Stand “Textiles Tradicionales en Alpaca-Cuzco”.
Los premios han contado con la participación de 75 piezas que son mostradas en un stand especial que se ha montado en la entrada de la Feria. Han participado casi todos los países participantes que han querido mostrar una pieza especial para la ocasión, Argentina, Turquía, Portugal, Ecuador, Paraguay, México o Perú son algunas de las procedencias de los artesanos participante. Trabajos de diferentes oficios artesanales como la joyería, textil, rosetas, tallas en madera y en piedra, bordados, juguetes, Imaginería, son algunos de los oficios que están representados con excelentes piezas. La cuantía de los galardones han sido un primer premio dotado con 1.000 euros; un segundo premio de 600 euros y un tercer premio de 400 euros.
En cuanto al jurado, estuvo conformado por especialistas y personalidades vinculadas al mundo de la artesanía. La presidencia ha corrido a cargo del consejero del Empleo y Educación, Efraín Medina; Juan de la Cruz Rodriguez, experto en Textiles y trajes tradicionales; Ageda Hernández Tarajano del Fondo para la Etnografía y el Desarrollo de la Artesanía Canaria; Elena Gutiérrez Lima;Krijer Lorenzo; Silvano Acosta; Ricardo Cologan, gerente de la Empresa Insular de Artesanía y Milagros Amador, técnico del Museo de Artesanía Iberoamericana de Tenerife. El jurado ha valorado para alcanzar su veredicto final la originalidad e innovación de las piezas a concurso; el carácter estético; la utilidad práctica; la calidad y el diseño.
Por otra parte, se entregó el premio a la mejor decoración de los más de 200 stands de la feria, dotado de 500 euros y que recayó en el Stand “Textiles Tradicionales en Alpaca-Cuzco”. El objetivo de este premio es el de es reconocer el esfuerzo creativo del artesano en la consecución de un montaje atractivo para la exposición y venta de su producción. El jurado ha estado compuesto por Daniel Pages; Graciliano Díaz Rivero;Santiago Castro; Juan Carlos Armas; Antonia María Rodriguez Delgado;Isabel Méndez y Juan Carlos Camacho. El jurado ha valoró la originalidad del diseño y los materiales empleados y la presentación del producto como escaparate publicitario y promoción del taller.