El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través del área de Servicios Públicos, informa de que la fuente escultórica de la emblemática plaza Weyler, así como los cuatro macetones que se encuentran a su alrededor, ya está rehabilitada. Un proyecto dirigido por la Fundación General de la Universidad de La Laguna, que ha contado con una inversión de 55.500,25 euros, y que ha incluido la instalación de fontanería, electricidad, iluminación y mejora de la estanqueidad del vaso de mármol, de estilo neoclásico, que data de 1899, y que está declarada Bien de Interés Cultural al estar incluida en la delimitación del Conjunto Histórico de Barrio de Los Hoteles-Pino de Oro.
En la presentación de la rehabilitada fuente, el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, valoró “el esfuerzo y el duro trabajo realizado por parte del equipo compuesto por conservadores, restauradores, arquitectos, químicos, geólogos y biólogos” y añadió que era necesario rehabilitar esta céntrica fuente para ponerla en valor porque es, quizás, la más importante que tenemos en la ciudad y su mejora ayuda a mantener nuestro patrimonio histórico y cultural”.
El concejal de Servicios Públicos, Carlos Tarife, explicó que “además de los trabajos de conservación de la fuente ornamental se han pintado todos los soportes de alumbrado público y se han sustituido las 16 luminarias existentes por otras con tecnología LED, consiguiendo un ahorro energético del 60%, pasando de 1600 W a 640 W la potencia instalada en la plaza”.
“Además hemos procedido a mejorar las zonas verdes de la plaza y a sustituir la flor de temporada con una inversión que asciende a 5.000 euros”, indicó el edil capitalino.
En la presentación también estuvo presente Antonio J. Sánchez Fernández., conservador-restaurador que, junto con el arquitecto José Yeray Santos Santana, IMESAPI, S. A. y Cúrcuma, ejecutó los trabajos de rehabilitación de la fuente.
Antonio J. Sánchez detalló en qué habían consistido los trabajos y aseguró “que se han resuelto los principales daños que presentaba la fuente, que estaban relacionados con su propia función y uso, y con los factores ambientales que la rodean”.
“Se ha hecho una limpieza química para eliminar los depósitos de la superficie de la fuente, se han resuelto las filtraciones, grietas y fracturas de reposiciones anteriores, se ha impermeabilizado el vaso, se ha aplicado material hidrofugante para repeler el agua, y además, se ha renovado la instalación de filtros e instalaciones”, comentó Sánchez.
El Ayuntamiento de Santa Cruz recuerda que tras estas labores de mejora de la fuente de la plaza Weyler existe un plan de mantenimiento y conservación integral que se revisará anualmente para evitar los daños provocados por la acción constante del agua, la aparición de microorganismo, y la erosión medioambiental de esta escultura simbólica del centro de la ciudad.