En el contexto del pleno municipal del próximo jueves en La Laguna, Unidas se puede llevará a la palestra la preocupación por la demora en la aprobación del nuevo Reglamento de Participación Ciudadana. La cuestión presentada por la formación política busca respuestas concretas sobre cuándo se prevé aprobar definitivamente el reglamento, cuya actualización es esencial para responder a las necesidades y dinámicas contemporáneas de la sociedad lagunera.
Desde hace meses, el espacio político ha estado abordando el problema de la aprobación del reglamento, vital para facilitar una participación ciudadana más efectiva y representativa en el municipio. A pesar de tener un borrador casi finalizado al cierre del mandato 2019-2023 y la previsión de que quedara cerrado el proceso tras las elecciones municipales, la aprobación definitiva del documento ha sufrido un destacado retraso, generando descontento entre la comunidad vecinal y las entidades sociales.
Rubens Ascanio, concejal y coportavoz de Unidas se puede, ha expresado su frustración ante la falta de acción: «Es inconcebible que, a pesar de tener un borrador que solo requería la incorporación de aportaciones vecinales, aún estemos esperando que este reglamento sea llevado a pleno para su aprobación. Esta situación impide que avancemos hacia una democracia local más sólida y participativa».
El reglamento de 1993, vigente actualmente, es considerado obsoleto por todas las partes y no adecuado para las necesidades actuales, limitando la capacidad de acción y representación de las entidades vecinales y sociales. La actualización de este marco normativo es vista por Unidas se puede como un paso fundamental para adaptar la gestión municipal a los tiempos actuales, permitiendo una participación más ágil, transparente y efectiva.
La propuesta de Unidas se puede se enfoca en concretar un calendario claro para la finalización y aprobación del reglamento en el pleno, asegurando la inclusión de todas las aportaciones vecinales recopiladas, algo que hemos trasladado a los dos responsables que han pasado por el área a lo largo del presente mandato. «Queremos un reglamento que realmente facilite y empodere la participación ciudadana, que sea un verdadero reflejo de la voluntad y las necesidades de los laguneros y laguneras», afirmó Ascanio.
La formación también ha criticado la gestión del gobierno local por no priorizar este tema, subrayando la importancia de un compromiso real con la cultura participativa. «Es momento de que el Ayuntamiento demuestre con acciones concretas su compromiso con la participación ciudadana, no solo con palabras. La Laguna merece un marco que promueva una verdadera colaboración entre el gobierno y su ciudadanía», concluyó Ascanio.
Unidas se puede espera no solo preservar la estructura democrática de La Laguna sino también revitalizar la relación entre la corporación municipal y la comunidad, facilitando un entorno donde la voz ciudadana no solo sea escuchada, sino que también tenga un impacto significativo en la gobernanza local.