El barrio de San Roque disfruta de un nuevo parque infantil, situado en los jardines del centro ciudadano de la zona. Su ubicación en este espacio responde a la propia demanda de las familias y vecinos y vecinas del entorno, “que nos han solicitado un emplazamiento seguro, visible y accesible en el que puedan jugar los menores”, señaló el concejal de Servicios Municipales, Fran Hernández.
El emplazamiento, indicó, cumple con los estándares modernos de seguridad y accesibilidad, “proporcionando un lugar inclusivo para todos”. El espacio se ha dotado con una variedad de aparatos de juego, entre ellos una casita inclusiva y un columpio doble con asiento inclusivo, “seleccionados para permitir que los pequeños se diviertan y disfruten juntos, independientemente de sus capacidades”, apuntó.
Además, para maximizar la seguridad, el parque se ha rodeado con un vallado de seguridad y el pavimento se ha cubierto con losetas amortiguadoras para reducir el impacto en caso de caídas.
Entre las mejoras realizadas, Hernández destacó el ensanchamiento del acceso desde la calle, cumpliendo con la normativa vigente de accesibilidad, “para permitir que las personas con movilidad reducida puedan ingresar al espacio con facilidad y comodidad”.
Además, por petición vecinal, se ha instalado un banco de mobiliario urbano, se han acondicionado las jardineras y se han plantado varios árboles para proporcionar sombra a la zona de recreo y entorno.