

La vicepresidenta primera de la Cámara, Ana Oramas, participó en el acto y expresó el compromiso del Parlamento con la inclusión y la escucha activa del colectivo. “Queremos darles voz y visibilidad, escucharles para que sus vidas y las de sus familias sean un poco más fáciles cada día”, subrayó Oramas.
La directora técnica de la Fundación Hospitalarias Tenerife, Emma Álvarez García, destacó los servicios y programas adaptados que desarrolla la entidad, orientados a promover el bienestar social de las personas con daño cerebral adquirido y sus familias. Entre ellos, resaltó la labor de la Unidad de Día de Daño Cerebral Adquirido y el Hogar Reconectados, un servicio pionero en Canarias que fomenta la autonomía personal y la reintegración social.


El manifiesto fue leído por Gustavo Arturo Morales, quien en representación del colectivo subrayó que el Daño Cerebral Adquirido (DCA) “irrumpe alterando los proyectos vitales, pero detrás de cada diagnóstico hay una persona con derechos, sueños y mucho que aportar a la sociedad”.
El texto reclamó la creación de un código diagnóstico específico que permita conocer la realidad del colectivo y diseñar estrategias efectivas de atención y acompañamiento.
Asimismo, el manifiesto hizo un llamamiento a abordar el DCA “no solo desde la mirada médica, sino también desde una visión social”, que impulse un archipiélago adaptado, inclusivo y participativo. “No pedimos caridad, queremos justicia”, concluyó Morales,








